lunes, 26 de noviembre de 2007

Normalizada

Me estoy convirtiendo en una obsesa de la corrección lingüística. Soy consciente de que, como toda obsesión, ésa tampoco es buena, pero es que veo una falta de ortografía y me enciendo. O mucho peor: escucho una burrada y me pongo de mala leche para todo el día.
Cuando era monolingüe, la cosa era más fácil. Pese al acento y las (preciosas) palabras propias, los andaluces hablan un español bastante correcto desde el punto de vista gramatical. El español en sí mismo es un idioma que se presta a pocos equívocos ya que no compite con ninguna otra lengua y tiene una academia que se preocupa de limpiarla, fijarla y darle esplendor (sic).
Pero, ¿qué me pasó cuando me volví bilingüe? Pues que empecé a darme cuenta de lo mal que habla la gente. El español que se habla en Catalunya es infame. Cada vez que oigo plegar, paleta, faena, lampista, pica o petar, se me ponen los pelos como escarpias. Si te preguntan a qué hora plegas, lo que quieren saber a qué hora acabas (el trabajo, normalmente). Un paleta es un albañil y un lampista, un fontanero. La pica no es ninguna lanza, sino un lavabo o un fregadero (la pica de la cocina, evidentemente). Petar es explotar y faena… sí, existe en español, pero oír expresiones como “hoy tengo mucha faena” me suenan fatal, como si en vez de tener mucho trabajo tuvieran que torear un Mihura durante toda la jornada laboral. Hay dos cosas más típicas de los catalanes castellano-parlantes que me pone de los nervios. Una es la utilización del verbo en primera persona del plural cuando no toca. Por ejemplo, un topo sevillano diría “Ayer fui con Gigio al cine”. En cambio, un topo nacido en Catalunya probablemente diría “Ayer fuimos con Gigio al cine”. ¿Cuántas topitos fueron al cine? Pues sólo dos, pero parece que hayan sido unos cuantos más.
La segunda característica delirante es el “pero” y el “por eso”. Una conversación típica sería más o menos ésta:

- Me he pasado toda la mañana intentando localizar a Topo Gigio.
-¿Y al final lo has encontrado, por eso?
- Sí, y no ha sido fácil, pero.

De verdad, de verdad, no digáis esas cosas fuera de Catalunya si no queréis que la gente os mire con cara rara.

Lo peor de todo es que los catalano-parlantes tampoco están libres de pecado. Por un lado están las palabras que, por interferencia con el español, todo el mundo usa aunque no existan. Por ejemplo, “inclús” en vez de “fins i tot”, “disfrutar” en vez de “gaudir”, “enterar-se” en vez de “assabentar-se” o “en ves” en vez de “en comptes” :) (ésta última me encanta)
Por otro lado, está el caso contrario: las ultracorrecciones. O sea, palabras que se dicen igual que en español, pero que la gente “catalazina” para que suenen más “guay”. Por ejemplo, “sapiguer” en vez de “saber” o “guixeta” en vez de “taquilla”.
Desde luego, si yo fuera política, metería mano en el asunto. No me vale que me digan que la gente habla mal por culpa de la interferencia con el español. No me vale por dos motivos. Uno, si a la gente le importara hablar bien su lengua (como parte primordial de unas reivindicaciones políticas concretas que aquí no vienen al caso), la estudiarían y la cuidarían. ¿O es que acaso todo el mundo es tan tonto como para no poder evitar de manera consciente la interferencia del castellano?
Dos, los presentadores de TV3 son los primeros de dicen cosas como “disfrutar” o que confunden “destí” con “destinació” y “direcció” con “adreça”. El caso es que la página de estilo de TV3 y Catalunya Ràdio es impecable. Totalmente abierta al público, gratuita y completísima. Lástima que los propios trabajadores del medio no la usen más.

Pero no os preocupéis. Hay algo que hermana a castellano-parlantes y catalano-parlantes. Una expresión que se ha popularizado hasta límites enfermizos y que hace que me suba por las paredes cada vez que la escucho (o la leo). Sí, amigos, me refiero al anglicismo, a la insoportable e inútil muletilla “a nivel de” (“a nivell de” en catalán).
Vamos a ver, necesito gritarlo: A NIVEL DE NO ESTÁ ADMITIDO POR NINGÚN DICCIONARIO DE NINGUNA LENGUA LATINA. Hasta donde yo sé, no existe ni en español, ni en catalán, ni en francés, ni en italiano. Proviene del inglés “at the level of”, y ellos la usan con el mismo significado con el que tanta gente la usa ahora.
¿Y por qué no existe en catalán o en español? Pues porque ya hay tropocientas palabras o expresiones que hacen la misma función.
Ejemplo práctico:

- A nivel de fotografía, las películas chinas son muy buenas.

¿Por qué hay que construir una frase tan rebuscada? Ya hay alternativas en nuestros idiomas totalmente válidas para expresar lo mismo:

- La fotografía de las películas chinas es muy buena/ La fotografia de les pel•lícules xineses és molt bona.

O incluso utilizando expresiones más complejas:

-En cuanto a la fotografía, las películas chinas son muy buenas / Pel que fa a la fotografia, les pel•lícules xineses són molt bones.

Muchas veces, “a nivel de” puede traducirse por un simple adverbio acabado en –mente (de los que, por cierto, no se debe abusar, pero son mil veces preferibles a “lo otro”), aunque en un 90% de las veces, a la frase no le hace falta nada para que se entienda de manera correcta.
Otra frase típica:

- La empresa está sufriendo muchos cambios a nivel estructural.

¿Pero qué, coño hace ahí ese “a nivel de”? Toda la vida de dios se hubiera dicho “La empresa está sufriendo muchos cambios estructurales”. Y punto.

De todas formas, la expresión “a nivel de” sí que es correcta cuando nos estamos refiriendo a la altitud de algo con respecto a otra cosa, bien en sentido físico o bien e sentido figurado. Por ejemplo:

- Quitamos los escalones para poner la puerta al nivel de la calle.
- Topo Gigio ha avanzado mucho y ya está al nivel de sus compañeros de clase.

Altura. “Al nivel de” (ojo, al nivel, no a nivel) significa “a la misma altura”.

Y con eso y un bizcocho…

jueves, 15 de noviembre de 2007

You can leave your hat on

Según la revista People, the 10 sexiest men alive, o sea, los diez hombres vivos más sexys del mundo son: Matt Damon, Patrick Dempsey, Ryan Reynolds, Brad Pitt, James McAvoy, Johnny Depp, Dave Annable, Will Smith, Javier Bardem y Shemar Moore.

Ole, ole.

A mí siempre me han hecho gracia estas listas porque son absurdas de principio a fin. Para empezar, lo de “alive” me da una grima terrible. Me imagino que un día harán la lista de “the 10 sexiest men dead” y publicarán fotos de esqueletos, cuerpos en descomposición y urnas llenas de cenizas. Llamadme rara, pero el primer requisito para que me mole un tío es que esté vivo, así que lo de “alive” me parece surrealista al máximo.
Otra cosa que no entiendo, es que cada año gane uno tío distinto. Yo sé que las modas son pasajeras y que la belleza es efímera, pero es muy triste no durar ni 365 días en el candelero… ¡no somos nadie! De hecho, los 10 en cuestión suelen ser los que más dinero han ganado ese año, los que se han metido en menos lío o los que se han hecho famosillos por salir en la tele. Es curioso que Matt Damon, el hombre vivo más sexy del planeta, sea también el más rentable. Sus películas hacen unas taquillas de escándalo y él cobra como una estrella de segunda. Personalmente lo encuentro bastante feo: es bajito para mi gusto y juraría que se aclara el pelo. Además, tiene 37 años y aparenta 25. Just creepy.




De Patrick Dempsey cuando tenía 15 años parece que sólo me acuerdo yo. ¿Cómo se puede pasar de actor adolescente lleno de acné a sex symbol? Pues protagonizando una serie de televisión de éxito. Reconozco que ha mejorado con los años (41 tiene ahora), pero yo le sigo viendo cara de persona poco inteligente. Y esas orejas…



A Ryan Reynolds no lo voy a criticar mucho porque me mola ^_^ De hecho, lo que me ha sorprendido es que saliera en la lista, porque tío que a mí me parece guapo, tío que la gente ignora. No estaría tan arriba en mi lista (tiene demasiada cara de yankee), pero dejaría que me invitara a una coca-cola :)



Como diría el Tim Burton de la Hora Chanante, Brad Pitt tiene una cara monesca. Que me perdonen sus admiradoras, pero yo cada día le veo más cara de momo titi. Además, que no, que un tío de 44 años teñido de rubio no puede ser sexy, coñe.



James McAvoy simplemente me da miedo. Está muy de moda después de haber hecho Las Crónicas de Narnia, El último Rey de Escocia y La Joven Jane Austen, pero a mí me pasa con este tío lo mismo que con Jonathan Rhys-Meyers: que le veo cara de niñato loco. Si me lo cruzara por la calle, probablemente cambiaría de acera.




Johnny Deep está ya muy mayor para estas cosas (y cada día más Sparrow, egs!).



Como no veo “Brothers&Sisters”, a Dave Annable acabo de conocerlo. Así a primera vista, no parece nada del otro mundo, pero le daremos una oportunidad.



Siempre he pensado que Will Smith era la definición perfecta de “efecto gamba”: le quitas la cabeza y te comes lo demás. Es feo y cienciólogo, pero vaya cuerpazo que luce el tío en Yo, Robot. Confieso que también dejaría que me invitara a una coca-cola ^_^




Y lo de Jarvier Bardem es la monda. Supongo que está en la lista por haberse liado con la Pe, pero yo encuentro su nariz really disgusting. Por no hablar de sus ojos ahuevados y su voz gangosa.




Y de Shemar Moore digo lo mismo que de Dave Annable. Como es la primera vez que oigo hablar de él, le concederemos el beneficio de la duda, porque el sexappeal de una persona no se puede juzgar sólo por un par de fotos (aunque el tatuaje del león me incline a darle un suspenso rotundo del tirón)




Ahora se me ha ocurrido que podríamos hacer nuestra propia lista. ¿Qué actor o actriz te parece irresistible? Venga, animaos, a ver si enseñamos a los de People a hacer una lista “com cal”. Único requisito: que estén “alive”, of course.

sábado, 10 de noviembre de 2007

Problemillas con el interné (y II): la venganza del nick enmascarado.

Internet me encanta. Pero también me cabrea. Y mucho.
Por ejemplo, esta mañana he vuelto a tener un disgusto (mini-disgusto, se entiende). Todo ha venido por un capítulo de una serie yankee a la que me he aficionado. Como en España no se emite, me la agencio de manera totalmente legal a través de la red. La serie es bastante chorra, pero hablan un inglés de los más facilitos que se pueden escuchar ahora en la tele americana. Perfecto para mejorar el listening. Lo que hago es verme los capítulos en V.O., así a palo seco, y después, si tengo alguna duda, me leo los subtítulos en español que edita un popular foro dedicado a estos menesteres.
El capítulo 6 de la serie lo vi el miércoles. Lo entendí casi todo, pero aprovechando que anoche colgaron los subtítulos, decidí echarles un vistazo a ver qué tal.
Fui a leer justo una parte en la que tenía una duda, y después continué leyendo hasta un punto en el que encontré un error de traducción flagrante.
Buena samaritana que soy, dejo un mensaje informando del error y ofreciendo mi colaboración si la necesitan (ya sabéis, uno de esos mensajes tan falsísimos y que tanto abundan, llenos de ja,jas y emoticonos, en los que haces mucho la pelota a todo el mundo para que nadie se te enfade). Esta mañana leo la respuesta, que resumida viene a ser algo así como “si tanto inglés sabes, cómo es que sólo has detectado ese error, listilla”. Entre líneas, lo que se lee claramente es “métete tus comentarios por el culo, gilipollas, y vete a dar la murga a tu **** madre”.
Qué fácil es decir burradas escondido detrás de un nick… Pues nada, con su pan se lo coman.
Sólo advertiros de que, si os descargáis los subtítulos en cuestión, cuando la protagonista susurra suplicante al oído del protagonista “Turn me”, no le está diciendo “Dame la vuelta” sino “Conviérteme”. Ella lo que quiere es ser vampiro. Dudo mucho que tenga complejo de tortilla de patatas.

jueves, 1 de noviembre de 2007

Locos por el sexo

Cada día entiendo menos al ser humano.
Resulta que ayer me puse a bajar unas cuantas pelis de James Bond.
Mi intención es hacer una especie de mix con los títulos de crédito para una coreografía que amenizará la sesión del Julius del sábado.
Acabo del volver del Carrefour y veo que se ha descargado la primera de ella: “El mundo no es suficiente”. Pues bien, abro el archivo, y resulta ser “Locos por el sexo”, una comedia española protagonizada por Jordi Vilches, Karra Elejalde e Inma del Moral.
Pa flipar.
Vamos a ver, yo entiendo que te pase eso con una peli de estreno. Por ejemplo, cuando estrenaron Match Point, reconozco que me la intenté descargar y en lugar de la película, obtuve un interesante documental del año de la picó (o sea, sin derechos) sobre las cataratas Victoria. Supongo que lo colgaría la distribuidora.
Pero, ¿a quién se le puede ocurrir colgar una película (con derechos de distribución) en lugar de otra estrenada hace ocho años? ¿Se supone que es una broma?
Pues no le veo la gracia, la verdad. Para más inri, “Locos por el sexo” se ve y se oye estupendamente. Surrealismo puro, vaya.

Evidentemente, después de mi fracaso, me he apresurado a comprobar que los otros títulos fueran auténticas películas de James Bond. Según los comentarios adjuntos al archivo, sí que lo son, pero ahí es donde viene la segunda parte de mi perplejidad. Se ve que dejar comentarios del tipo “buena calidad” o “audio correcto” sólo lo hacen dos de cada 10 personas. Lo normal es dejar mensajitos publicitando diferentes páginas web, sexo “gratis”, aceleradores de descarga, casinos on line y demás basurilla. Incluso me he encontrado con un comentario que decía: separatista+hombre de bien = imposible.
O sea, que me pido cascarón de huevo, porque yo este juego cada vez lo entiendo menos.